Kameni: "Soñar con la Champions ya no está prohibido"

Carlos Kameni (Camerún, 1984) está firmando otro gran arranque de temporada que ayuda a explicar los históricos registros de un Espanyol instalado en Champions. El meta abandona su tradicional prudencia y habla sin tapujos sobre la posibilidad de que el Espanyol se clasifique por primera vez para la exclusiva competición europea.
El domingo, ante el Sporting, juega su partido 200 con el Espanyol en Liga. Le han cundido los años que lleva en Barcelona.
Sí, es una cifra muy importante. Y era algo que no me atrevía ni a soñar cuando llegué al Espanyol en verano de 2003. Procedía de una Liga diferente y de un equipo que mucha gente no conocía. Sabía que venía a una de las ligas más importantes del mundo y que tendría mucha competencia. Pero con el trabajo y esfuerzo diario y la ayuda de los técnicos y mis compañeros he llegado hasta aquí.
¿Y hacia dónde le lleva el futuro?
Pues ojalá que pueda cumplir otros 200 más en Liga con el Espanyol. Yo me siento muy feliz y querido aquí. Mi deseo es seguir. Estoy agradecido por la confianza que han depositado en mí y por el cariño de la grada. Oír cómo Cornellá corea mi nombre me llena de orgullo y de felicidad. No sé explicarte bien lo feliz que me siento entonces.
Es decir, que, de momento, no cambia de aires, pese a la baja cláusula que tiene.
No, no tengo intención de irme. Pero en el fútbol tampoco se sabe nunca, puede llegar algo importante para el club, pero yo soy muy feliz aquí.
Con la gran temporada que está haciendo no extrañaría que alguna entidad se pusiera en contacto con el club. Ya hay rumores sobre su salida.
No sé nada, pero si yo estoy rindiendo a un buen nivel es gracias al trabajo de todo el colectivo. Yo no soy nada sin los compañeros que tengo delante y en el vestuario. Los triunfos es por mérito de todos. Los veintitantos jugadores de la plantilla estamos rindiendo bien y así se explica nuestro buen momento y nuestra gran clasificación en la tabla.
Cuartos. Con 13 jornadas disputadas y 25 puntos, la meta ya no es la permanencia.
Todavía nos queda mucha liga por delante, pero soñar con la Champions ya no está prohibido para nosotros. Estamos ahí por méritos propios y es momento de disfrutarlo. Hemos llegado ahí gracias a nuestro trabajo y esfuerzo y debemos seguir así. No podemos perdernos del camino que llevamos. Nosotros somos ambiciosos y queremos lograrlo.
Con partidos como el del Calderón lo lograrán seguro. Por cierto, fue usted clave a la hora de frenar a Quique Sánchez Flores, que iba directo a por Luis García.
Quique es una buena persona y yo charlé con él para tranquilizarlo, porque se había puesto un poco nervioso. A cualquiera le pueda pasar en según qué momento, pero debemos intentar todos estar tranquilos. Al fútbol se va a disfrutar y a pasarlo bien, no a generar polémica. Además, nosotros, los deportistas, somos un ejemplo para mucha gente. Pero Quique es una buena persona.
Le creo. Volvamos a su celebración del domingo. De estos 200 partidos de Liga, ¿Cuál es el que más le ha dolido y cuál le ha amargado especialmente?
Para mí el peor fue el que jugamos la temporada pasada en Cornellá ante el Racing de Santander. Perdimos cuatro goles a cero. Fue muy duro.
¿Y el que más le satisface?
El empate a cero ante el Barcelona en el Camp Nou. Fue muy especial por muchos motivos.